Ascensión a La Alcazaba

Descargar GPS o ver en Google Earth en http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=401370. 29 de Septiembre de 2007. 3.371 m.

Después de la ascensión al Posets, debemos volver a Granada. Allí espera la Alcazaba, 5º pico más alto de la Península, y cuya ascensión nos depararía más de una sorpresa.

Viajamos a Trévelez, en plena sierra de la Alpujarra, más al sur de Granada. Larguísimo viaje, por lo que llegamos justo para poder dormir unas horas antes de que de nuevo José Manuel, nuestro conocido guía de hace 2 años en Mulhacén-Veleta, nos recogiera temprano para tomar la furgoneta de acercamiento al Parque Nacional. El tiempo no es bueno, totalmente cubierto de niebla, y hace mucho frío cuando la furgoneta nos deja. ¿Qué hacemos aquí?, parecen decir nuestras miradas. Incluso José Manuel dice: “andamos un poco, y si no despeja, nos damos media vuelta”.

Pero tras una hora andando en la niebla, al ascender unos a unos 2000 metros dejamos las nubes por debajo y un sol espléndido nos da la bienvenida a una ascensión inmejorable.

Mantenemos esa altitud un rato bordeando un pico nevado, desde el que por un momento la cima de la Alcazaba se asoma tras el Peñón del Globo. Todo el paisaje es insospechadamente blanco.

Debemos descender a la laguna de Culo de Perro, donde almorzamos brevemente, e impelidos por la aparente cercanía del pico, salimos como sarrios hacia la cima. Error, porque las pendientes se acentúan enormemente, y cuando parece que llegamos,…., aparece la Alcazaba aún más allá!.

Y José Manuel, que nos ha visto fuertes, que no para. Sergio y Elena hacen bien adoptando su ritmo,

Eladio, Carlos y Pedro nos dejamos las muelas siguiendo al guía hasta la cima remontando rampas inesperadamente pronunciadas. Desde luego, mucho más duro que el Mulhacén, tanto el acercamiento como la ascensión a la cima. Y todo el camino solos, nadie más corona la Alcazaba ese día.

Tras el almuerzo en la cima, las correspondientes fotos incluyendo un completo book de Elenita y la ya tradicional siesta en las cumbres de Eladio, regresamos por otra ruta,bordeando la cara del Mulhacén opuesta a la que ascendimos hace 2 años ( no logramos encontrar la bola de golf de Paco).Nos vemos obligados a descender y remontar una pronunciada pendiente con José Manuel tirando muchísimo; menos mal que Sergio impone cordura, se pone delante, y marca un paso lento pero seguro, o alguno habría fenecido en el retorno. Tras la última subida, tomamos ya de franco descenso un empinado barranco hasta Siete Lagunas.

Tras un descanso volvemos por el mismo camino original hasta el lugar de recogida de la furgoneta, pero como es pronto, decidimos seguir la marcha hasta el pinar donde está la entrada al Parque. Son casi 2 horas más de caminata, pero no nos importa, nos sentimos fuertes.

De regreso a Granada, revivimos la ascensión durante nuestra noche de tapas, habiendo conquistado para siempre los picos de Sierra Nevada en nuestras piernas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *